La afición se mostró muy enojada con el plantel, luego de que el argentino se vaya del club «Culé».
Barcelona inició esta tarde el ciclo futbolístico ‘post-Messi’ con una contundente victoria 3-0 sobre Juventus de Italia, resultado que le permitió adjudicarse el tradicional trofeo Joan Gamper.
En el estadio Johan Cruyff, con algo más de 2.900 espectadores en la tribuna, el equipo dirigido por el neerlandés Ronald Koeman intentó hacer olvidar la reciente partida del mejor jugador que pasó por las filas de su institución: Lionel Messi.
Sin embargo, los hinchas se hicieron sentir con un tremendo abucheo a los jugadores a quienes responsabilizan por la partida de la Pulga.
Samuel Umtiti y Miralem Pjanic fueron los principales apuntados. Ambos estaban en la lista de jugadores negociables del blaugrana, que les buscó un nuevo destino sin éxito, para intentar equilibrar la economía del club. Es que el defensor tiene un contrato con el club valuado en casi 13 millones de euros, mientras que el del mediocampista asciende hasta poco más de 16 millones. A ambos se los notó visiblemente molestos ante los silbidos, mientras estaban sentados al costado del campo.
Antoine Griezmann, Ousmane Dembélé y Philippe Coutinho fueron otros de los apuntados. Es que, mientras al primero se lo marca por no haber estado a la altura de las expectativas desde su llegada, a los otros dos se los critica por pasar más tiempo por la enfermería del club que en las canchas.