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«Las puertas de mi armario me despertaron, eran como las 4.20 de la mañana», recordó Carlos Martínez, sobre el sismo de 7,8 grados que sacudió Turquía y Siria.
Carlos Martínez, un profesor de inglés y español radicado en Turquía, contó este martes cómo se desarrolló la caótica jornada tras el terremoto que sacudió al país y cuyo epicentro estuvo a 60 kilómetros de la frontera con Siria.
Según números actualizados por la agencia Reuters, más de 7.800 personas murieron y arriba de 35.700 quedaron heridas por los derrumbes y otros daños materiales provocados por el terremoto ocurrido en la madrugada del lunes 6 de febrero de 2023.
El epicentro estuvo en el distrito de Pazarcik, en la provincia de Kahramanmara, en el sureste de Turquía.
También se estima que 13 millones de personas quedaron afectadas de manera directa por el sismo, ya sea porque perdieron sus hogares o negocios, o porque quedaron aislados.
Por eso «mucha gente comprando cosas, abasteciéndose de víveres porque ya se siente como una pequeña escasez, especialmente de agua», relató Martínez .
«Fue una situación muy fea, es la primera vez que me pasa algo así. Desde que nací, en la Argentina, nunca había sentido un terremoto», agregó el docente antes de explicar que el sismo «dejó muchas familias afuera, dejó muchos edificios colapsados, gente asustada, que no sabe dónde va a dormir».
«Gracias a Dios el Gobierno actuó bastante rápido abriendo refugios, como en la escuela donde yo trabajo, donde voy a pasar la noche hoy», señaló mientras emitía su mensaje frente a las ruinas de un edificio que data del siglo XIX.
«Las puertas de mi armario fueron las que me despertaron, eran como las 4.20 de la mañana. Cuando vi las puertas abriéndose y cerrándose pensé que era una pesadilla. Me costó entender que era algo real hasta que evacuamos el edificio y fuimos al parque», recordó el hombre.
Este martes transcurrió entre operativos de seguridad, pedidos de auxilio y búsquedas de personas, al menos en Turquía. Se registraron 50 réplicas del sismo a lo largo del día, algunas con 7,5 grados de intensidad en la escala de Richter.
«Hace mucho frío aquí, estaba nevando en ese momento también, todavía hay resto de nieve pero está soleado», describió.
